Luis Felipe Becerra: De cargar bultos a ser profesional del fútbol
Un palmirano de ‘pura cepa’, como se utiliza en el argot popular, cotudo ciento por ciento pues nació y se crio en el Barrio El Portal de las Palmas, de Palmira y que estuvo alejado de la actividad futbolística por algo más de seis años, es una de las nuevas incorporaciones de Internacional F.C. de Palmira.
Estamos hablando de Luis Felipe Becerra Molina. Un hombre que en su niñez y juventud mostró grandes condiciones al punto que con solo 16 años se fue a probar al Valledupar. Pero al tener una desilusión futbolística, regresó a la Villa de las Palmas y se puso a trabajar, olvidándose del fútbol durante buen tiempo.
Una historia de superación personal
Desde mediados del año 2011 hasta finales del 2017, el palmirano laboró como conductor de camioneta en una empresa lechera. Después tuvo otros trabajos porque debía ayudar en la casa, hasta que se vinculó a un granero en la Galería las Delicias. Y allí fue un todero pues le tocaba ser vendedor, empacador, despachador y todo lo que encierra trabajar en la Galería Central de Palmira. Incluso en ocasiones le tocó cargar bultos para hacer despachos. Pero ahora, para bien del fútbol, está de nuevo como una gran alternativa por la franja derecha de Internacional F.C. de Palmira.
Luis Felipe siempre se inclinó por el fútbol, pero sin dejar de lado los estudios. Con buen pie y con movimientos rápidos, se inclinó por ser delantero, aunque con el paso del tiempo se fue retrasando hasta quedar en la posición que hoy en día utiliza, o sea la de lateral derecho.
En las categorías inferiores actuó con Atlético Valle y ‘pintaba’ para llegar bien lejos, como se lo dijo uno de los profesores del Colegio Raffo Rivera, Carlos Hernández Aranzazu.
“El docente me contactó con un empresario quien me recomendó viajar a probarme en Valledupar. Tenía 16 años, acababa de terminar el bachillero y con mucho esfuerzo viajé a esa ciudad y estuve practicando algo así como tres meses. Estuve en la Casa Hogar, pero el técnico de ese entonces me pidió plata para poder jugar, cosa que rechacé porque a duras penas había conseguido para los pasajes”, dijo Felipe.
Esa situación adversa hizo que regresara a su tierra, Palmira, y se olvidara del fútbol como profesión pues había recibido un duro golpe por lo que le había ocurrido en la capital del Cesar.
Laborando duro y jugando
De retorno a su natal Palmira y con el compromiso de seguir ayudando a sus padres, el jugador tuvo algunos trabajos esporádicos que lo hicieron olvidarse del fútbol.
“Me alejé de las canchas, a nivel de profesión, pues en el trabajo no me quedaba tiempo sino parte de la tarde de los domingos. Esos días salía de laborar a la una y no faltaba quien me invitara a reforzar algún equipo. Yo lo hacía porque me ganaba unos pesos extras que me servían para ayudar en la casa. Fueron más o menos unos tres años en los que seguía jugando fútbol, pero recreativo y sin entrenar, pues no me quedaba tiempo”, dijo Luis Felipe.
Comienzo profesional
Dos años después de la llegada de Orsomarso a Palmira, a finales del 2017 y cuando Luis Felipe iba a cumplir 23 años, se presentó una convocatoria del citado equipo para tener un grupo de jugadores palmiranos.
Algunos de sus compañeros lo indujeron a que se presentara, a lo cual accedió, aun sabiendo que no estaba bien físicamente. Pero los directivos de conjunto palmirano querían tener muchachos nativos y eso lo motivó de nuevo.
“Tuve la fortuna de pasar esas pruebas y poder reiniciar mi carrera como futbolista. Imagínese la alegría que sentí, después de tres años de estar encerrado en un granero en la galería, laborando de seis a seis. Además, debuté ante Boca Juniors con una satisfacción adicional pues ese día, 17 de febrero de 2018, conseguí mi primer gol”, añadió el lateral.
El jugador reconoce que esa vocación ofensiva quedó desde la niñez cuando actuó como delantero, además del cambio de ‘chip’ que le hizo el técnico Edward Muñoz quien lo recibió cuando se presentó a las pruebas en Orsomarso. Fue el citado profe quien lo puso a jugar como un enlace entre la zona defensiva y los aleros.
Amplio recorrido
Tres años continuos estuvo Luis Felipe en el conjunto palmirano con el que alcanzó a actuar en 61 partidos, anotando 4 goles.
Con el retorno a prácticas, después del encierro por la pandemia, el profesor Edward Muñoz lo recomendó con el técnico del Huila en ese entonces, Dayron Pérez, quien lo ilusionó porque podía estar en primera división.
“De una le dije al profesor Dayron que sí. Era la primera vez que podía actuar en Primera División y eso es muy motivante. No sabe la emoción que produce enfrentar a equipos como Medellín, Pasto, Bucaramanga y América. Estar en el Pascual Guerrero y tener que medirse con jugadores de mucho recorrido como Adrián Ramos, Steven Lucumí, Luis Paz y Marlon Torres, entre otros, es algo que no se olvida. Se aprende mucho y de verdad que ese paso por el equipo Opita me formó mucho más”, dijo el palmirano.
Para el año 2022, Luis Felipe Becerra se fue para el Real Cartagena donde actuó en 17 partidos, consiguiendo su quinto gol profesional, en la portería defendida por Kevin Arnesto, del Llaneros.
Ya el año pasado le puso sello a su pasaporte pues se fue a jugar con Alvarado, un equipo de la segunda división de Honduras donde actuó hasta abril del 2024.
Su llegada a Internacional
Estando en el país Centroamericano, se enteró de la llegada de Internacional a Palmira y su anhelo fue vincularse con el equipo. En ese sentido quien lo ayudó, al menos para presentarse a las pruebas, fue el exjugador palmirano Emir González quien habló con los profesores Carlos Hernández y Fernando Velasco para que le hicieran las pruebas.
“Esa fue otra alegría grande que tuve. Gracias a Emir González por la recomendación que me dio y por acercarme a los profesores. Desde que llegué de Honduras quise vincularme con Internacional. Por eso me entregué de lleno en las distintas prácticas que tuve y no sabe la felicidad tan grande que sentí cuando me aceptaron. Primero por lo que representa el club y segundo porque estoy aquí, con mi familia y voy a estar arropado en todos los sentidos”, dijo el jugador.
Grupo espectacular
Para el defensa palmirano llegar a un equipo como Internacional es cumplir uno de sus sueños. “Siempre admiré este equipo por su organización, por el grupo de jugadores, sus directivos y todo lo que ha representado en la Primera B. Es maravilloso ver cómo todos y cada uno de los integrantes se entregan en busca de un objetivo común. Y el cuerpo técnico está pendiente del más mínimo detalle de los jugadores. Por ello invito a la afición a que nos acompañen pues todos estamos comprometidos por una causa común que es el ascenso”, concluyó el representante del Barrio El Portal de Las Palmas.
Así es Luis Felipe Becerra Molina. Un hombre que, con muchas condiciones futbolísticas, tuvo que retirarse seis años de la actividad pues lo habían rechazado del Valledupar por no pagar ‘el derecho a jugar’.
Departamento de Comunicaciones
Internacional F.C. de Palmira